domingo, 10 de marzo de 2013

Hola de nuevo

Buenas tardes a todos los que visiten este blog que, todo hay que decirlo, lo tenía completamente abandonado desde hace varios meses. A día de hoy me encuentro acabando mi carrera en una universidad del sur de Suecia. La verdad es que una vez que sales de España te das cuenta de lo que es aquello y lo que debería ser. Los países escandinavos son conocidos por lo respetuoso y avanzado de su sociedad y estilo de vida, sin embargo hasta que no lo vives y lo comparas con nuestro país no te das cuenta a qué se refieren.

Empezaré por algo muy sencillo: los suecos no candan las bicis en la calle, y lo curioso es que si alguien las roba probablemente sea algún español o italiano. Esa es la fama que tenemos.

La sociedad sueca está basada en dos cosas más que básicas: el respeto y la confianza. Si necesitas ayuda puedes pedírsela a cualquiera que te van a echar una mano con una sonrisa en la cara. En un cruce en plena calle principal de la ciudad no se oyen las bocinas de los coches porque se respetan y se ceden el paso como debe ser. No candan las bicis porque tienen esa confianza que les hace comportarse con la famosa y ética regla de oro:"No hagas a los demás lo que no quieras que te hagan a ti". No llegan tarde porque les parece una falta de respeto que la otra persona tenga que malgastar su tiempo esperándote a ti. En el McDonalds con el Happy Meal no dan cochecitos, dan libros educativos sobre astronomía o el mundo animal. Los impuestos sobre el alcohol son muchísimo mayores evitando así que éste sea tan accesible.

Esto son sólo pinceladas de lo que ves nada más llegar al país, completamente diferente al ruido y egoísmo que te encuentras en España. En los próximos días iré posteando cosas más concretas que se podrían aplicar a nuestro sistema para que todo fuese mejor. Cosas como el sistema educativo, algunos servicios públicos, la distribución del alcohol y demás que te hacen pensar sobre cómo sería España implementando estas medidas.

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